Consejos para mejorar la iluminación del vehículo

El sistema de iluminación del vehículo hace parte de la seguridad activa, su función es entregar la mejor intensidad de luz para poder ver el camino, sin obstaculizar la visión de otros vehículos.

Existen varios tipos de bombillos: halógenos, siempre ubicados en el frente del vehículo y con denominaciones H1, H4, H7, entre otras; antiniebla, intermitentes, de tablero de instrumentos, interior del vehículo, luz de freno, de reversa, de portaequipaje y de placa.

Estas son algunas recomendaciones para lograr una larga duración sin fallos:

1. Verificar la correcta aplicación y las especificaciones de voltaje, vatios y tipo de conector.

2. Preferiblemente no manipular el cristal con los dedos porque sudor, grasa o partículas pueden adherirse al cristal causando que altas temperaturas de trabajo disminuyan la vida útil. 

3. Antes de instalar bombillos nuevos, se debe apagar el vehículo y todo el sistema de iluminación.

4. Cambiar siempre los bombillos por parejas para evitar una iluminación desigual.

5. Alinear las luces cada dos años o después de realizar algún trabajo de lámina y pintura (carrocería) en la parte frontal del vehículo.

6. Verificar la correcta presión de inflado de las llantas del vehículo porque puede variar el ángulo de proyección de las lámparas delanteras.

7. Revisar el correcto funcionamiento de la batería; también del conector, cables y guardapolvo que protegen las lámparas.

8. Examinar el sistema de iluminación antes de viajar para tener mayor seguridad y confort al conducir.

Recuerde que el rendimiento luminoso de los bombillos puede disminuir 50 % después de 2 años de uso continuo.