Maneja con cuidado durante esta temporada lluviosa: tips y recomendaciones

Nov 27, 2020
Redacción Carroya.com
Foto: iStock
Una calle mojada genera pérdida de estabilidad, mal agarre del vehículo y las llantas no son las únicas afectadas durante un aguacero. Aquí te contamos todos los riesgos y cómo minimizarlos. 
 
Los vientos fuertes y las lluvias también afectan el campo de visibilidad por lo que es indispensable como primera precaución desempañar los vidrios. Por fortuna, la tecnología cada vez más avanzada para los carros ayuda a reducir el riesgo. Hay frenos antibloqueo, sensores que detectan peatones u otros objetos cerca del carro, control de estabilidad, control de tracción, entre otros. 
 
Al momento de pasar por un charco debes bajar la velocidad, pues el agua puede esconder huecos profundos, que si se atraviesan con gran velocidad pueden dañar las piezas de la suspensión del carro e incluso afectar los rines o pinchar las llantas.
 
El sistema de frenado es uno de los que más sufre al momento de entrar en contacto con el agua, porque se mete entre las pastillas y el disco de freno haciendo que se reduzca su eficiencia al momento de presionar el pedal.
 
 
Cuidado con el hidroplaneo
 
Según CESVI Colombia, el hidroplaneo tiene que ver con la pérdida súbita de adherencia de los neumáticos sobre la vía, donde la rueda patina sobre el agua con poco contacto al pavimento, esta situación también se conoce como aquaplaning y puede ser más peligrosa cuando se incrementa la velocidad del carro.
 
Aunque este fenómeno puede ocurrir en cualquier tipo de vehículo, es necesario considerar cuál es el estado que presenta la banda de rodadura del neumático, así como el tipo de labrado, pues existen diseños exclusivos para circulación en piso seco y que generalmente se utilizan para vehículos de competencia, y que por su condición conlleva a una fácil aparición de hidroplaneo. 
 
Hay neumáticos que tienen diseños específicos, lo que se llama surcos longitudinales, transversales y diagonales. Este diseño nada tiene que ver con lo estético, por el contrario obedece a la necesidad de mitigar el fluido que se encuentra en la calle o carretera mientras el carro se encuentra en circulación, ya sea agua, aceite u otro fluido. 
 
Algunos tipos de surcos. Foto: iStock
 
 
La presión de las llantas: un punto clave
 
La presión de inflado de los neumáticos es un factor que puede producir una pérdida de control o falta de adherencia y la llanta puede hacer que el carro patine. Una recomendación es que prestes mucha atención al estado en que se encuentra el neumático ya sea por desgaste o exceso de presión, ambos casos resultan peligrosos al momento de conducir sobre pavimento mojado o húmedo. 
 
Ejemplo:
 
https://www.revistaautocrash.com/wp-content/uploads/2018/05/SV3.jpg
 
 
 
Si te agarra la lluvia en carretera
 
Consulta el estado de las vías o carreteras, más aún si está lloviendo porque el riesgo de un deslizamiento de tierra o derrumbe incrementa. A través del #767 o en las cuentas de Twitter @TránsitoPolicía, @Invías o @numeral767 puedes verificar el estado de las vías nacionales en tiempo real las 24 horas del día.
 
Mantente preparado antes de salir de casa con botas, chaqueta impermeable y paraguas. Llévalos dentro de la cabina, no en el baúl, para que sea más fácil acceder a ellos en caso de que debas esperar por si hay algún deslizamiento de tierra más adelante o si el carro se queda varado en medio de la lluvia.
 
 
Otras recomendaciones:
 
- Disminuye la velocidad en la conducción, al momento de circular por tramos húmedos o encharcados y en general durante cualquier intensidad de lluvia.
 
- Si consideras que las condiciones para manejar en medio de la lluvia son difíciles,  parquea el carro en el lugar más cercano y apto para hacerlo mientras se calma la situación.
 
- Verifica que las luces estén funcionando correctamente.
 
- Si la lluvia te agarró fuera del carro, cuando ingreses al habitáculo seca muy bien los zapatos en los tapetes antes de que pongas en acción los pedales. 
 
- Realiza una revisión de labrado y profundidad de los surcos de los neumáticos, pues está directamente relacionado con la posibilidad de pérdida de control. No olvides verificar la presión de inflado de los neumáticos. Cuanto mayor sea el desgaste de los neumáticos, menor será la eficiencia y, por ende, mayor la distancia del frenado.
 
- No realices maniobras fuertes en la dirección o frenos, pues considerando la pérdida de adherencia de los neumáticos sobre la vía, puede presentarse fácilmente pérdida de control del vehículo, por derrape.  De ser mayor la velocidad, el caso puede terminar en volcamiento.
 
 
 
 
 



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