Peritaje: la prueba de fuego para un vehículo usado
Seguramente has escuchado hablar del famoso peritaje que no es más que una revisión técnico-mecánica que se le hace a un carro o moto para conocer su estado y expedir una certificación para saber el valor comercial y las condiciones en las se encuentran. Este peritaje es común que las personas lo soliciten cuando van a comprar un ‘segundazo' y si esa compra o venta se está realizando entre particulares, esto para asegurar que el vehículo está en óptimas condiciones y que nada vaya a salir mal.
Pero, exactamente ¿Para qué sirve el peritaje vehícular y en qué consiste? Te lo contamos:
Lo primero que van a revisar es el estado del corazón del vehículo, el motor: si tiene fugas, cómo están los niveles de aceite, si la potencia es óptima y cómo se encuentra en general la máquina, mejor dicho, nos dirán si está al pelo para andar. También se revisará el sistema eléctrico y cómo funcionan los accesorios y las piezas del vehículo como por ejemplo la batería, así sabremos si de entrada el vehículo prende bien o no.
Luego de esto se revisa la estructura general del chasís y la suspensión (amortiguadores, tijeras, bujes, etc) y estos nos va a asegurar que andando no se nos van a ir las ruedas para un lado y la dirección para el otro y que la suspensión es óptima para sobrevivir a todos los huecos de la ciudad. Después se comprueba el funcionamiento de la caja y la dirección para diagnosticar si el desgaste de las llantas está bien o si hay que cambiarlas. En ese proceso también se revisa el estado de las pastillas, los discos, las bandas y las campanas.
En el peritaje también se hace un diagnóstico de la parte exterior del vehículo: Parales, pintura, vidrios, boceles, bumper delantero y trasero, luces, etc. y esta parte es muy importante porque aquí es cuando se sabe si el vehículo ha tenido uno que otro golpe fuerte o accidente.
La parte interior del vehículo (en el caso de las motos hablamos del asiento) también debe ser evaluada: si la tapicería está en buenas condiciones, el techo, los parasoles, el tablero, el radio, el timón, la palanca de cambios, entre otros.
Ahora ¿Qué debes tener en cuenta cuando te entreguen el resultado del peritaje?
Verificación estructural del vehículo
En pocas palabras, podrás identificar la originalidad de la carrocería y el chasís del vehículo y verificar si las piezas han sido repintadas o reparadas.
Determinación de eficacia
Con esto podrás identificar: Si el vehículo se comporta bien durante los recorridos, si la suspensión es adecuada y si los frenos están en buenas condiciones.
Verificación de los sistemas de identificación del vehículo
Con el peritaje, no solo diagnósticas la parte estructural del vehículo, también podrás saber si el vehículo está reportado en centrales, si tiene algún tema legal pendiente o si los elementos de identificación han sido removidos o alterados.
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